lunes, 9 de mayo de 2011

El Círculo de Oro islandés

Gullfoss

El círculo de Oro, es como se conoce popularmente a este circuito turístico formado por el parque nacional Pingvellir, Geysir y la cascada Gullfoss, tres enclaves de suma importancia natural a un paso de la capital, Reykiavik.

Parque nacional Pingvellir
Al norte de Reyjavik (Mosfellsbaer), se toma la carretera 36, en buen estado, para llegar a Pingvellir (41 km.). Unos pocos kilómetros antes de llegar se da vista al enorme lago Pingvallavatn. Os recomiendo una parada en el cercano  Centro de Visitantes del parque nacional Pingvellir, no sólo por la información que siempre se obtiene antes de la visita sino por el mirador que se ubica en sus inmediaciones. Es una magnífica panorámica del fenómeno geológico por el que es famoso este espacio natural protegido: una enorme brecha de 7 kilómetros de largo (fisura de Almannagjá). Se trata de la falla que separa las placas tectónicas europea y americana, la denominada Dorsal de Reyjavik. Un tremendo escalón con varios metros de desnivel propiciado por los movimientos tectónicos que se abre paso en la horizontalidad del paisaje. Un paisaje, por cierto, en el que llama poderosamente la atención la riqueza floral que lo tapiza. El suelo volcánico se caracteriza por una gran fertilidad pero la humedad ambiental permite además el desarrollo de comunidades vegetales únicas que cubren casi cualquier grieta o fisura. Flores de colores y especialmente líquenes y musgos constituyen la alfombra vegetal de Pingvellir. Incluso se desarrollan arbustos. Además de su importancia geológica –única en el mundo-, Pingvellir es un bastión histórico fundamental en la historia de Islandia, pues aquí se reunió el parlamento islandés (siglo X); asamblea de Alpingi.

Falla entre las placas tectónicas

La carretera bordea el lago por el norte ofreciendo bellos paisajes y panorámicas sobre las aguas lacustres y las islas que de él emergen. Existen otros lugares de parada para pasear por la falla y visitar diferentes enclaves del parque como las cascadas. Antes de llegar a Midfell, abandonamos la 36 a la izquierda por una estrecha carretera (365) que más adelante deja de estar asfaltada (aunque tiene visos de asfaltarse en breve) hasta la localidad de Laugarvatn, a orillas de un bello lago, donde se toma la 37 hacia el norte, en dirección a Geysir, nuestra próxima parada.


Geysir
Ya sólo el nombre explica lo que nos vamos a encontrar al llegar a Geysir. En efecto se trata de una zona en el valle de Haukadalur repleta de procesos geotermales e hidrotermales que han bautizado mundialmente el fenómeno por el que se produce una emanación brusca de una columna de agua hirviendo y vapor de agua. “Chorro” que se repite de forma periódica. Un lugar (acceso libre), junto a la carretera, en el que la superficie terrestre se halla repleta de fumarolas, afloramientos de agua (hay más de 600 manantiales termales en Islandia) y géiseres. El más famoso y antiguo del mundo es el llamado Geysir, ya extinto, que alcanzaba 70-80 metros de altura. En la actualidad la máxima atracción es el geysir llamado Strokur, que alcanza 25-35 metros y se repite cada 5-10 minutos para sorpresa continuada de los visitantes. Se trata del segundo geysir en actividad más alto del mundo después del Old Faithful (Yellowstone, USA), con 25-55 metros.

Géiser Strokkur

Al caer al suelo después de la propulsión, el agua se evapora y deja alrededor de la chimenea de expulsión un halo blanco en la superficie debido a los cristales de geiserita. Existe un Centro de Interpretación de los Geysir en el que podéis ampliar la información.

Zona geotermal en Geysir

Gullfoss
El tercer enclave del Círculo de Oro es la espectacular cascada de Gullfoss. A 9,6 kilómetros de Geysir, por la carretera 35 se llega a la “Cascada de Oro” (Gullfoss).
La cascada Gullfoss es célebre por su fácil acceso y proximidad a la capital, y por su forma y enorme caudal, que despeña las aguas del Hvítá, en una singular cascada en forma de L, con 37 metros de caída la primera y 50 metros de profundidad la cascada inferior. Una serie de miradores dispuestos sobre las rocas basálticas permite disfrutar de diferentes panorámicas de ambos saltos. A la senda que enlaza los miradores por la parte izquierda de la cascada (derecha orográfica del río), se accede desde el aparcamiento superior, con restaurante, tiendas e información, o bien desde el parking la caída de la cascada inferior, a la que se llega por la carretera que sale en una curva unos metros antes de llegar al gran aparcamiento superior. Es posible acercarse hasta el borde de las rocas, junto al salto superior, pero cuidado con los resbalones.
Desde el aparcamiento superior, en días despejados, es visible el glaciar Langjökull.

Cascada de Gullfoss

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