miércoles, 31 de agosto de 2011

Sendas botánicas del valle de Sorteny


Otro de los sellos de identidad del parque natural del valle de Sorteny, quizá su recurso natural más sobresaliente, es la flora. Sorteny cuenta más de 700 especies diferentes. Algo sumamente importante si tenemos en cuenta de nuevo la reducida superficie de este valle.
La ruta de las aves y mariposas comienza en el cap del Grau, pero para acceder hasta allí es preciso cubrir el tramo que separa este punto del centro de información situado en la puerta de entrada de este espacio natural protegido.
Grandalla.


Desde el aparcamiento inferior, junto al citado centro, una barrera impide el tráfico rodado desde las 10 hasta las 19 horas. No obstante para las presentes rutas que a continuación os voy a comentar es preciso dejar el vehículo en el aparcamiento y subir caminando. Sea cual sea la opción elegida, la subida es breve y sin dificultad (aproximadamente 1 hora por ruta). La primera opción es la que conduce directamente hasta el cap del Grau por la pista de tierra. Casi ya al final del recorrido pasa junto al jardín botánico y antes, os habréis fijado en los carteles que indican el resto de rutas a pie. Son tres rutas y en su conjunto se denominan las sendas botánicas de Sorteny. Una está indicada como la ruta de la ardilla (esquirol), otra como la ruta de la Marta y una tercera como la ruta del Grau de la Llosa. Se trata en los tres casos de sendas oportunidades para observar la flora que crece en el entorno del rio de Sorteny, donde habita el desmán de los Pirineos, si bien recorren tres hábitats diferentes:

Senda de la Ardilla.


La senda del Grau de la Llosa tiene una longitud de 400 metros y un desnivel de 80 m. Está señalizada con color azul y es la que más se aproxima al curso fluvial. Recorre el bosque de umbría del piso subalpino en el que crecen abetos, pinos negros, serbales, abedules y álamos. En el estrato herbáceo crecen especies megaforbias, que llegan a alcanzar los 2 metros de altura (calabacera, saxífraga de hoja redonda, calderones, acónitos, verónicas, etc.). Se observan también especies de hábitat rocoso y ambiente húmedo. A medida que avanzamos vamos descubriendo diferentes especies de saxífragas y otras plantas umbelíferas y medicinales como imperatoria romana, saúco, hierba centella, etc.  Predominan los suelos ricos en minerales y en especial el nitrógeno, de forma que abundan especies nitrófilas como el azafrán silvestre, diente de perro, flor del viento, etc. En los ambientes más secos crecen tomillos, siemprevivas, albahaca, enebros, grosellas  o vermicularias. Un gran mosaico vegetal en poca distancia.

Entrada al valle de Sorteny

Símbolo del parque natural.


La senda de la Marta recorre 900 metros de distancia entre la entrada y el jardín botánico (90 metros desnivel). Está señalizada con el color rojo y recorre bosque claro y mixto de pino albar y abedul. También paisajes afloramientos de roca del Roc del Quer (paredes rocosas y canchales). Se observan entre otras muchas especies algunas tan vistosas y llamativas como el lirio pirenaico (flor de lis o azucena del Pirineo) o la azucena silvestre, endemismos ambas.

Inicio de la Senda del Grau de la Llosa.


La tercera ruta botánica es la senda de la Ardilla, en color verde. Tiene una longitud de 600 metros de distancia y un desnivel de 90 metros. Se adentra en el corazón del pinar, donde vive el roedor que da nombre a la ruta. La segunda vez que hice esta ruta me encontré nada más y nada menos que con un pequeño grupo de 6 ardillas en un mismo árbol. Proliferan enebros, gayubas y rododendros tapizando el suelo, pero crecen multitud de pequeñas flores a ambos lados de la senda.

Boraginácea.


Para recorrer estos senderos os recomiendo los trípticos con la explicación de cada senda (centro de información del parque natural). Se trata de senderos autoguiados y a lo largo del recorrido existen carteles con números cuya explicación encontraréis en estos trípticos.

Una última recomendación es la visita al Centro de la Naturaleza situado en La Cortinada, muy cerca de Ordino, un buen aperitivo para conocer la naturaleza andorrana.

Centro de la Naturaleza en La Cortinada.

sábado, 20 de agosto de 2011

Reservas naturales de oso panda gigante

Patrimonio de la Humanidad del hábitat del oso panda gigante
En la provincia china de Sichuan vive el 95% de los pandas salvajes.


Con apenas 1.500 ejemplares de oso panda gigante en libertad y en un territorio inmenso como es la provincia china de Sichuan (similar al tamaño de España), os adelanto que observarlos en estado salvaje es algo así como buscar una aguja en un pajar. Miento, mucho antes encontraremos la aguja. Siempre que se sale al campo a observar naturaleza salvaje el factor suerte debe estar con nosotros. A partir de ahí observar pandas salvajes puede ser cuestión, por lo general de semanas… pero desde luego “haberlos haylos”. En Sichuan viven el 95% de los pandas gigantes y crecen más de 200 especies de bambú, así que parece lógico pensar que estamos en el sitio adecuado para el encuentro. En esta provincia de China existen diferentes reservas dedicadas al oso panda y juegan un papel muy importante no sólo en el estudio científico y cría de la especie, sino a la hora de poder observarlos en su medio natural. No en libertad… pero casi. 

Habitat del oso panda gigante, entre 1.100-3.500 metros de altitud.


En las montañas de Sichuan se localizan las reservas de Wolong, Feng Tong zhai, Si Gu Niangshan, La ba He, Hei Siu He, Jin Tang Yi kong Yu, Cao Po y Bifengxia. Algunas de estas reservas naturales, que también son parque nacional y scenic area de 3 ó 4 A, están cerca de la capital Chengdu. La reserva nacional natural de Wolong es sin duda la más famosa. Lamentablemente se vio muy afectada por el fuerte terremoto del año 2008, que tuvo en esa zona su epicentro. Después de las tareas de recuperación y acondicionamiento, este año se reabre como la más grande e importante, cosa que por otra parte ya era.

En las reservas es posible el contacto cercano con los osos.


Los osos panda gigantes viven en una altitud entre 1.000-3.500 metros, así que ahí es donde se encuentran las reservas. Estas reservas por cierto están todas incluidas dentro del Patrimonio de la Humanidad del Hábitat del Oso Panda Gigante, que así es como se denomina. La más próxima a la capital, Chengdu, y de mejor acceso (1 hora) es la de Bifengxia, en Ya´nan. Al final de la autopista estas montañas se levantan de golpe y, aunque no superan los 1.200 metros, parecen por su forma abrupta mucho más elevadas. Se encuentran tapizadas profusamente por la vegetación selvática que adquiere, entre otras muchas especies, los diferentes tipos de bambú de los que se alimenta este tierno mamífero, el animal nacional de China.
Entrada reserva Bifengxia.


Bifenxia es también un centro de ocio en contacto con la naturaleza, con un zoológico donde los animales viven en semilibertad. También es un parque nacional que alberga la espectacular garganta de Bifeng (Bifeng gorge), pero Bifengxia es sobretodo un centro de pandas. Como el resto, tiene un área  en el que los osos viven bajo estudio y al cuidado en diferentes recintos integrados en su medio natural, a semejanza de como ocurre en el Centro de Investigación y Reproducción (BASE) de Chengdu, pero de dimensiones más reducidas. Cuenta con servicios (restaurantes, centro de visitantes, etc.) y está dotado de senderos en los que caminar en contacto directo con la naturaleza y quien sabe si encontrar en libertad la ansiada aguja en este inmenso pajar de bambú y selva. El mejor ejemplo es el sendero que recorre la absolutamente espectacular Garganta Bifeng.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Pandas, selva y agua en Bifeng Gorge

Parque nacional Bifeng Gorge.
Reserva de Pandas Bifengxia BASE
La garganta está recorrido por un resbaladizo y espectacular sendero.


Bifeng Gorge es un lugar con el que no contaba. Pensaba en ver pandas y en su hábitat, pero desde luego me cautivó la profunda brecha labrada por el río en la reserva de pandas Bifengxia, en las inmediaciones de Ya’an. Bifeng Gorge, la Garganta de Bifeng, es parque nacional y os puedo asegurar que aunque de dimensiones reducidas, es uno de los vergeles más imponentes que he visto en mi vida. Montañas calcáreas tapizadas de verde. Selva, bambú y agua, mucha agua. Cascadas preciosas y humedad casi del 100% en un paisaje de postal, englobado dentro del Patrimonio Mundial de la Humanidad para el hábitat del Oso Panda Gigante.


El parque se encuentra a poco más de 1 hora y media de Chengdu. 1 hora de autopista por el terreno de la planicie de Sichuan y media hora de ensueño por las primeras estribaciones montañosas de esta provincia china, que van aumentando progresivamente su altitud hasta superar los 8.000 metros en el Himalaya.

Abajo se intuye a dos senderistas en el mirador

Las montañas de Bifeng Gorge no superan los 1.200 metros. Tampoco les hace falta para rebosar belleza y hacerse sentir a uno insignificante. Tienen sitio suficiente para labrar esta vertical garganta de unos 200 metros de profundidad que es magia pura.
Se accede desde la parte posterior del centro de visitantes mediante un ascensor que desciende hasta el fondo a través de la montaña, pero yo os lo recomiendo de subida, descendiendo a pie por otra de las entradas, cerca de la reserva de pandas.

En el parque se encuentra la Reserva de Osos Pandas Gidantes Bifengxia.

Sendero perfectamente acondicionado en la garganta.


Cascada del Pato Mandarín.
Un servicio de bus realiza el transfer entre el centro de visitantes (con restaurantes, etc.) –donde se compra el billete para ir a la reserva y, opcional, la entrada a la garganta- y la zona donde se encuentran los osos panda. Os recomiendo tomar el bus hasta arriba, caminar por los senderos asfaltados para ver los pandas y, de regreso, bajaros en la parada de bus que da acceso a la garganta. Es la parada junto al templo Bifeng y cerca del templo del Dragón. Un sendero bien indicado a la derecha de la carretera se adentra en el bosque para ir bajando en suaves lazadas hacia la entrada de la garganta Bifeng. El recorrido completo es circular, rodea la reserva Bifengxia y mide unos 7 kilómetros. Podéis realizarlo entero en media jornada pero con realizar los 3 kilómetros (unas 2 horas) hasta el punto donde se toma el citado elevador que os dejará junto al centro de visitantes es suficiente para adentraros en este apasionante vergel de selva y espectaculares cascadas.


El sendero se abre paso como puede, unas veces horadando la roca, otras por el borde mismo de la orilla, pero siempre junto al río. En cualquier caso está perfectamente acondicionado y señalizado, como es costumbre en los parques nacionales chinos. Mucho cuidado con los resbalones en el recorrido pues la presencia de agua sobre la piedra es casi permanente ya sea procedente de las cascadas o procedente de las nubes que suelen envolver estas montañas y que mantienen la temperatura constante entre 10-20 ºC. Si no desde luego, no se explica tanto verde.



Durante la bajada veréis pozas, saltos de agua como los del Dragón Azul, el Pato Mandarín, y rincones en los que uno se quedaría a vivir si pudiera. Destaca la cascada de 120 metros de altitud llamada “Cascada de los Mil Escalones”, a la que se llega cruzando el río por el puente de piedra y caminando río abajo 5 minutos desde la zona del elevador. A lo largo del recorrido completo, algún lago e islote en el curso del río y cascadas, más cascadas. La garganta Bifeng es como digo pura magia. He de confesar que me sorprendió y cautivó desde el primer momento.



ÉPOCA DEL AÑO. Todo el año. Garganta con temperatura constante 10-20º y un elevado grado de humedad. Se recomienda llevar protección para el equipo fotográfico (mochila o bolsa impermeable), chubasquero y es imprescindible buen calzado para evitar resbalones.
Objetivo cortos y angulares.

viernes, 12 de agosto de 2011

Mariposas de montaña en Sorteny

Sorteny es un vergel para las mariposas como esta Melitea didyma.

Después de muchos post con propuestas de ecoturismo y safaris fotográficos, éste es el primero íntegro dedicado a las mariposas. También en el parque nacional Royal Chitwan (Nepal) realicé un safari fotográfico de mariposas, pero no como objeto principal de la propuesta. El parque natural del Valle de Sorteny, en Ordino, presume con motivo de varias cosas en su minúscula superficie de extensión, pero sin duda, uno de sus principales atractivos entre mayo y septiembre es el entomológico. Infinidad de especies de mariposas diurnas y nocturnas, varias de ellas protegidas a nivel continental, vuelan de forma incesante por los diferentes hábitats de este fantástico espacio natural protegido.

Pieris rapae sobre flor de rododendro.

Señalización al comienzo del recorrido.


Buena parte de culpa tiene el excelente catálogo floral del parque, con más de 700 especies. Otra de las joyas que merece ser abordada a parte, como de hecho reflejan las tres 3 sendas botánicas de Sorteny a las que dedicaré el próximo post. Y todo en un palmo de terreno, en las escasas 1.080 hectáreas de un pequeño valle andorrano con no más de 5 kilómetros de longitud. Una joya natural que me sorprendió el día que la visité por primera vez y que me sigue encantando varias visitas después.

Grandallas, flor nacional de Andorra.

En el parque existe una ruta señalizada en la cota 1.900, que comparte trazado también con la ruta autoguiada ornitológica aprovechando los diferentes hábitats que atraviesa, muy sencilla, corta y gratificante ¿se puede pedir más?
Si no hubiera mariposas de por medio, la ruta circular no lleva más de 10-15 minutos si se hace sin parar, pero allí pasé un par de horas deleitándome con el vuelo de cientos de mariposas. Y hubiera pasado unas cuantas horas más embelesado, prismático y cámara en mano, contemplando y fotografiando aves, flores y lepidópteros de montaña.

Exsten guías con las principales especies de la ruta a disposición de los visitantes.


La ruta de las aves y mariposas de Sorteny comienza en el aparcamiento superior (Cap del Grau) y recorre una pequeña muestra de las más de 70 zonas húmedas del parque. Siguiendo los pertinentes carteles se cruza el río de Sorteny en un par de ocasiones para completar este recorrido dividido en 7 secciones: En la sección 1 encontramos prados en los que vuelan, entre otras especies, Colias común (Colias crocea), Boloria euphrosyne o la amenazada Erebia cassioides.

Lysandra coridon, abundante en el parque.

El valle desde las inmediaciones del refugio.

La ruta entra a continuación en un bosque de pino negro (piso subalpino) donde observar Coenonympha pamphilus, Plebejus argus y Lycaena virgaurea. Al pinar sigue una zona de canchal (sección 3) caracterizada por la presencia de Pieris rapae, Leptidea sinapis o Coenonympha arcania, entre otras.
Superado el pequeño canchal se entra de lleno en zonas de prados, donde se reparten las siguientes 4 secciones. Primero con la presencia de Argynnis aglaja, Pieris brassicae o Vanessa cardui, luego una zona de prado de siega con Aglais urticae -abundante en las ortigas-, la pequeña y vistosa Cyaniris semiargus o la Issoria lathonia.
Parnassius mnemosyne habita los prados de Festuca.


Los dos últimos tramos de la ruta están dominados por los prados de Festuca. En el primero (sección 6) casi exclusivamente con Festuca paniculada ssp. spadicea y en el siguiente con Festuca de la misma subespecie y landas. Es el hábitat de dos de las especies más relevantes y amenazadas: Erebia meolans a la que acompañan otras como Gonepteryx rhamni y Parnassius mnemosyne en la sección 6 y la joya de la corona, Parnassius apollo (mariposa Apollo) junto con Anthocharis cardamines, Lysandra coridon, Melitaea didyma en la última de las secciones entre prados de Festuca y landas.



En la caseta de información y centro de visitantes, en el aparcamiento principal, se presta a los visitantes que lo soliciten material de apoyo para realizar la ruta. Este material consiste en una guía plastificada con la descripción del recorrido y las principales especies (foto y ficha técnica) de mariposas que podéis encontrar. Existe también la posibilidad de contratar los servicios de guías especializados para realizar éste y otros safaris fotográficos por el parque natural del valle de Sorteny.

Existen safaris fotográficos organizados.

martes, 9 de agosto de 2011

Circos glaciares de Andorra

Circo glaciar del Pla de l'Estany.

Pla de l’Estany y Pessons son dos ejemplos de circos de alta montaña de aspecto bien diferente; rocosos ambos, pero notablemente distintos en cuanto a apariencia. En cualquier caso sublimes los dos. Comparten origen de tipo glaciar, el mismo que moldeó la cara de la cordillera pirenaica tras las bruscos movimientos tectónicos y posteriores plegamientos que levantaron las montañas que separan (y unen) a Francia, España y Andorra. De eso hace ya mucho, algo así como 230 millones de años del primero de ellos (en la era Terciaria). Luego, del maquillaje diario se encargó -y lo sigue haciendo a diario-, el viento y sobre todo la erosión glaciar.
En un país de alta montaña como Andorra son muchos los circos de origen glaciar. Os propongo conocer hoy dos de los más bellos:

Lago en el Pla de l'Estany.


Plá de l’Estany, en Comapedrosa.
El Pla de l’Estany, en el parque natural comunal de los valles del Compadrosa,  es un amplio y profundo circo glaciar con buen desnivel y verticalidad. Su primera visión me recordó a otros circos pirenaicos como Barrosa o incluso Pineta. Allí arriba aguardan los lagos más altos de Andorra, inmersos en un paisaje extraterrestre (Forcats y Montmantell) al pie de los 2.913 m. del Pic de Medacorba y los 2.859 m. del pic del Pla de l’Estany respectivamente. Novecientos metros más abajo, en la base de este circo glaciar de libro, se asienta el estany del Pla de l’Estany. El lago no es grande y ocupa parte del fondo de la cubeta glaciar. La colmatación ha hecho que el estany ocupe sólo una pequeña parte de la superficie que algún día ocupó. En el lecho de la cubeta crecen buenos pastos, afloran bloques de piedra y se almacena la escorrentía que baja en el deshielo por las empinadas canales que lo enmarcan. Un buen lugar para ver rebecos y corzos, por otra parte.



Al Pla de l’Estany se puede llegar caminando de forma fácil (se trata de uno de los circos glaciares más accesibles) o incluso en verano a lomos de caballo mediante las excursiones que organiza la oficina de turismo de la Massana. Como la citada excursión guiada ecuestre sólo incluye la ida, deja libre el regreso para bajar por el mismo camino o bien (os lo recomiendo) adentraros en el mundo forestal de Les Fonts y descender por las bordas de Percanela. Ambas opciones están bien indicadas. De paso echaréis un vistazo al vecino circo de Les Fonts, de aspecto mucho menos agreste. El bosque de Les Fonts es uno de los más interesantes de Andorra, con un estupendo estado de conservación en el que bioindicadores de la salud ambiental como los líquenes tapizan las cortezas de los pinos negros y rojos.

Llegando al circo del pla de l'Estany.

Bosque de pino negro en Les Fonts.



Circo de Pessons.
Muy diferente es el aspecto de Pessons, donde el paisaje granítico preside cualquier rincón. Pessons no posee el desnivel ni la verticalidad del circo del Pla de l’Estany, pero su cabecera que, va perdiendo altura progresivamente en pequeñas balcones, regala al visitante una colección de lagos de montaña (de origen glaciar, claro) sin desperdicio. Por algo es una de las rutas clásicas del Pirineo. Las alturas que cierran el circo rocoso de Pessons son similares a las del Pla de l’Estany (pic dels Pessons 2.864 m.) pero a diferencia de éste, es un circo mucho más grande y abierto. De nuevo de manual.
Estany del Cap des Pessons.


Pessons es un circo granítico de enormes dimensiones, el mayor de Andorra.


Para recorrerlo basta con seguir las señales del GRP (el sendero de Gran Recorrido que da la vuelta a Andorra) desde el aparcamiento del Grau Roig, en Encamp.
De nuevo una excursión sencilla, con similar desnivel a la anterior (unos 500 metros) y dos paisajes, como os, digo totalmente diferentes. ¿Con cual quedarme? Uff! muy complicado, prefiero los dos.

lunes, 8 de agosto de 2011

Compartiendo baño con las ballenas Jorobadas

Un baño junto a estos gigantes de más de 15 metros.

La ballena jorobada o yubarta es probablemente el animal acuático que protagoniza la mayor migración anual del planeta, pudiéndose desplazar más de 25.000 kilómetros en sus movimientos entre las regiones polares y las ecuatoriales. La mayor población de este mamífero marino, que habita en todos los grandes océanos y mares del mundo, se encuentra en el Pacífico Sur. A sus aguas llegan cada año, procedentes de la Antártida, los grupos de yubartas que entre julio y finales de octubre-primeros de noviembre encuentran en la Polinesia todo cuanto necesitan. Probablemente el mejor enclave para contemplarlas sea la isla de Moorea, en el archipiélago de la Sociedad y a unos 10 minutos en vuelo desde Thaití (30 minutos en barco regular).

Las aletas pectorales alcanzan un tercio de la medida del cuerpo.

En Moorea no sólo se realiza whale watching desde los barcos sino que se ofrece la oportunidad irrechazable de ¡¡darse un baño con ellas!!
En efecto, el whale watching es una actividad que se realiza durante todo el año de la mano de los centros de buceo de la isla: Moorea Fun Dive, Top dive Moorea, Moorea Blue Diving Center o Ia Ora Diving, o de la mano también del experto biólogo norteamericano Michael Pole, que lleva desde 1992 realizando actividades de observación de cetáceos en aguas de Moorea y que es uno de los principales impulsores de la declaración de las aguas de esta paradisíaca isla (y de la Polinesia Francesa) como santuario de ballenas.

Snorkeling con ballenas jorobadas.

Durante todo el año Moorea cuenta con una población estable de delfines: los acrobáticos delfines de hocico largo (Stenella longirostris), los delfines de hocico estrecho o dientes rugosos (Steno bredanensis) o las ballenas piloto (Globicephala sp.) pero durante casi 5 meses, las ballenas jorobadas (Megaptera novaeangliae), hacen acto de presencia en las aguas para reproducirse y con ellas las excursiones de observación de cetáceos adquieren una connotación especial, ofreciendo la experiencia de poder nadar en compañía de estos cetáceos. Gafas, tubo, aletas… y ¡al agua! ¿Os podéis imaginar lo que se siente nadando al lado de un gigante de más de 15 metros de largo y 36.000 kilos de peso? Pues imaginad que además tenéis la suerte (frecuente en esta época del año) de escuchar los cantos que los machos emiten relacionados, probablemente, con el cortejo.
Una experiencia excitante y relajada a la vez, difícil de explicar.


Las aletas pectorales de estos rorcuales (en realidad no son ballenas sino cetáceos misticetos, como las también mal llamadas ballenas piloto, que son calderones –cetáceos odontocetos-.) llegan a medir 5 metros. Pero su nombre común de ballenas jorobadas se debe a su lomo y pequeña aleta dorsal. La etología de estas ballenas permite además interactuar con ellas de forma espectacular, pues se trata de la especie más acróbata entre los cetáceos de mayor tamaño. Una experiencia absolutamente inolvidable de la que podéis encontrar más información en español en Turismo de Tahití.


viernes, 5 de agosto de 2011

Por los mares del Sur


Cumplidos ahora diez años de mi visita a Tonga, sus aguas, sus gentes, y la naturaleza de este pequeño país me cautivaron para siempre. Para siempre marcó mi vida esos días a lo Robinson Crusoe navegando y viviendo en las islas deshabitadas de Tonga. Como comentaba en el post anterior sobre este país, estaba cubriendo para la revista Turismo & Aventura (que dirigía por aquella época) la que a la postre sería la última edición del Camel Trophy.


Tonga posee islas de origen volcánico y de origen coralino.


A diferencia de las 19 ediciones anteriores, el todo terreno había sido sustituido por una potente lancha neumática y los equipos se lanzaban a surcar los mares del sur durante semanas, siguiendo estrategias (o no), comiendo lo que la madre naturaleza podía proveerles o abasteciéndose en las escasas islas habitadas de este archipiélago con más de 176 islas diseminadas en una pequeña porción del Pacífico Sur. Sólo 36 cuentan con población permanente. Están divididas en tres grupos principales: Tongatapu (con la capital Nuku’alofa y los arrecifes Minerva), Vavaú (destaca la isla más alta: Toku, con 1.033 m.) y Ha’hapai.
Murciélagos durmiendo

Aquí estoy durante el Camel Trophy Tonga-Samoa.

He querido rescatar estas fotos (por entonces diapositivas, así que pido perdón por su calidad “digital”) y compartir con vosotros unas aguas sorprendentes. Es complicado encontrar más coloraciones en este paraíso. Qué deciros de la sensación de navegar sobre arrecifes de coral, de llegar a islas formadas por simples bancos de arena, de conocer islas calcáreas tapizadas por una selva impenetrable en la que vuelan cada noche miles de inmensos murciélagos del tamaño de aves rapaces, de ver humear volcanes, de la experiencia de compartir navegación con un buen número de cetáceos y escualos…


Para llegar lo mejor es desde Auckland, capital de Nueva Zelanda. En un vuelo de un par de horas estaréis en el paraíso, en plena Polinesia.
Y hablando de paraísos y cetáceos, el próximo día regresaré a aguas polinesias, a la isla de Moorea, donde se ofrece la experiencia de nadar…. ¡¡con ballenas jorobadas!!, rorcuales que también llegan a Tonga en el invierno austral.